Hoy es uno de esos días en los que inexplicablemente me siento mal. Que quiero tus abrazos y no puedo tenerlos. Que necesito tu voz, que me hacían sentir especial. Que necesito tus ojos para que se me olviden las penurias de esta vida.
Mientras escribo esto siento un frió de soledad recorrer mi cuerpo. Sabia que si te ibas, yo tendría que sufrir el dolor de la ausencia mas grande... El que llega después de conocer el calor de la compañía, el cosquilleo de la felicidad.
Recuerdo el ultimo día que te vi. Tenia miedo que no volvieras a mi lado, mucho miedo. El terror y la agonía que sentí cuando me dijeron que tu ya no regresarías. Habías hecho un viaje a otro mundo, a un mundo que yo había tratado de llegar en variadas ocasiones y que tu habías detenido esas ideas de viajar. Me quede aquí, me quede por que me lo pediste, me quede. Ahora ya no hay ningún medio que yo pueda tomar por propia voluntad sin tener que romper mi promesa hacia ti. Solo hay uno, uno simplemente y tardara años a que llegue.
Tengo que tener paciencia, lo se... pero cada vez que llega un día como este, nublado y frío, que me haga pedir tus brazos me desespero por que no llegue pronto.
Trato de distraerme, buscando en otros lo que contigo tenia. Amistad y sin que ninguno lo dijera... un amor de niños. Pero no lo encuentro, pues nadie es como tu, pues actualmente nadie tiene sentimientos tan lindos como los que tu tenias... u.u es una pena, una tragedia que yo aun este esperando tu regreso a un sabiendo que no llegaras.
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